Se deben impulsar políticas públicas con un alcance mayor que el relacionado exclusivamente con el nivel educativo específico, tanto a escala nacional -mejorando la articulación entre los sectores implicados- como en lo que se refiere a la concertación de estrategias compartidas entre los países de la AP. Para esto último sería interesante la puesta en marcha de programas de cooperación y difusión de experiencias exitosas a ser contextualizadas en las diferentes realidades.